Sombras de corazones rotos.

Jamás había sido tan feliz, cada despertar estaba lleno de pensamientos amorosos y completamente placenteros . No importaba lo gris que estuviese el día por que para mi todos y cada uno de ellos eran brillantes. La vida perecía tener más energía que antes.
Pero todo terminó, fue tan repentino que los buenos momentos se empañaron dejándome este horrible sentimiento que aún dura. Los recuerdos dolorosos comenzaron a hacer sombra a los buenos momentos que habían cambiado mi realidad.
Y el verdadero problema es que el dolor tarda un largo tiempo en hacerse real. No es algo instantáneo, por que no rompen tu corazón y aprendes una lección al instante. Las penas del alma no se viven en un solo momento, los corazones se rompen de forma infinita.

Maldiciones de amor

Nos fuimos consumiendo a fuego lento, ahora nuestras almas calcinadas piden a gritos resurgir entre aquellas cenizas . Quieren eternidad, necesitan amor, ese que jamás pudimos cuidar. Eramos jóvenes de almas libres, llenos de sueños y anhelos de futuros increíbles, futuros que juntos no supimos crear, simplemente no pudimos mantener eso tan grande que sentíamos, el amor nos destruyo por completo a ambos, camuflándose como odio durante mucho tiempo. Nos buscábamos y nos encontrábamos cada tanto, pero nuevamente el maldito orgullo y el rencor nos volvía a separar una y otra vez...

Destinos.

Ella llegó con el alma llena de ilusiones, esperando toparse con el pasado intacto y sentimientos vibrantes. Sin embargo el comienzo fue difícil, nada como lo había imaginado, bastante doloroso, lo suficiente como para que el corazón se quedara en un oscuro rincón, lleno de miedos, de esos que te rajan el alma de un instante a otro.
Su cuerpo comenzó a explotar como un volcán en erupción del cual brotaban sentimientos, de esos que habían quedado muy en el fondo escondidos. Y seguramente ni ella misma quería que fuese así. De todos modos nadie puede detener el amor...Ese que ambos sentían y no admitían por miedo a desenterrar un pasado que había tenido un final algo doloroso. Un final que en realidad nunca existió, por que sus vidas estaban destinadas a entrelazarse nuevamente.