No se imagina lo hermoso que es ante mis ojos, no se imagina como recorro cada parte de su cuerpo, observando detalladamente cada espacio de su piel.
Me encanta verle mientras despierta en las mañanas y en las noches al dormir. Amo el reflejo del sol en sus ojos, me enamore de cada una de sus muecas, sus gestos, de todo lo suyo.
Adoro los pedacitos de cobre que sobresalen en su mentón y el lunar encima de su mejilla.
Sus labios son una tentación a la que no me resisto, juro que cada uno de sus besos son una delicia!.