Sé valiosa para ti misma.

Te pido perdón por hacerte pasar por todo este sufrimiento, por hacerte llorar todas y cada una de las noches, obligándote a destruirte de una forma lenta y dolorosa.
Por mi culpa tu manera de mirar ya no es la misma, ahora tienes una mirada profundamente triste y tus ojos llenos de lágrimas amenazan con estallar a cada momento. Se que tu voz se quiebra al intentar hablar de amor, y tus manos son incapaces de tomar el mundo e iluminarlo como lo hacías antes.
Pero hoy todo cambiará...Vamos, sécate el rostro, recoge tu cabello, arréglate y levántate de una maldita vez. Sal caminando con la cabeza en alto, se fuerte, permítete amar y ser amada sin miedos, si resulta, sera bueno y si no se convertirá en un aprendizaje. Ríe hasta llorar de alegría y llora de amargura hasta que las penas calmen. Disfruta de cada paisaje, de los momentos y personas que te rodean. No te prohíbas vivir, soñar ni sentir, recuerda que en lo mas básico e insignificante se esconden las cosas mas sorprendentes y valiosas.